SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

lunes, 26 de mayo de 2008

LA VIDA LOCA DE JOHNNY TAPIA


"Nunca pienso en el mañana porque quizá no llegue". Son las palabras más sensatas que ha pronunciado en su vida el boxeador de Nuevo México Johnny Tapia (Alburquerque, 1967). Otro barco sin rumbo en una vida de tempestad, que le ha golpeado bajo y duro. Su padre murió asesinado, su madre fue acuchillada y secuestrada ante su mirada infantil. En el boxeo encontró su desahogo, ganando cinco títulos mundiales. Pero su loca cabeza y la cocaína le han llevado seis veces al hospital por sobredosis, 10 al calabozo por diversos escándalos y más de una docena a centros de desintoxicación, sin mucho éxito. En un momento tuvo una iluminación, se tatuó a Cristo entre pecho y abdomen, además del lema que mejor le describe, "mi vida loca". Ni sus arranques de fe ni los cuidados de su sufrida mujer y representante, Teresa Chávez, víctima habitual de sus momentos de furia, pueden equilibrar su vida de excesos. Hoy disputa en un hospital el séptimo asalto contra la muerte. Segundos fuera.

Publicado en La Región (21-05-2007)