SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

jueves, 10 de julio de 2008

JOHN DALY, DE HOYO EN HOYO


"Por Dios que he intentado dejarlo, pero no puedo. Lo llevo en la sangre". El californiano John Daly (1966, Carmichael) contrasta en un tradicional deporte de caballeros como el golf. Gordo, histriónico, alcohólico, fumador tan compulsivo como ludópata, es capaz de sorprender con golpes imposibles o perder un torneo a escasos centímetros del hoyo final. Su vida responde a lo segundo. Saltó a la fama en 1991, pero su cabeza inestable está arruinando su talento y bolsillo. Ha pasado por tres clínicas de rehabilitación, ha dilapidado 60 millones de dólares en Jack Daniel´s y casinos, según sus cálculos. Ha sido acusado en dos ocasiones por maltrato y una por acoso. Multado en el circuito profesional con 90.000 euros por diversos desacatos. Después de tres divorcios, afronta su cuarto matrimonio con Sherrie, una chica angelical recientemente detenida por asuntos de juego y drogas. En 1999 Daly anunció su retirada, vencido por el alcohol. Hoy sus devaneos cautivan a medio Estados Unidos, donde se preguntan de forma morbosa cuál será el próximo hoyo.

Publicado en La Región (02-07-2007).