SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

sábado, 12 de marzo de 2011

11-M, ESPERANDO LAS RESPUESTAS / 11-M, WE HOPE THE ANSWERS


Se cumple, que no celebra -ojo a las pifias de los medios de comunicación- siete años del mayor atentado de la Historia de España. Una catástrofe que además mostró al mundo la miseria moral de la clase política y buena parte de los habitantes de este país.

Siete años después, al igual que escribimos en su momento sobre el autogolpe fallido del 23-F, seguidos observando agujeros negros en la investigación, desarrollo, sumario y consecuencias de aquella masacre. Exísten datos, hechos que, cuando menos, incitan a la duda razonable. ¿Dónde se ha visto que un policía se lleve una prueba clave del caso a su casa? ¿Dónde se ha visto que un policía ordene destruir la improvisada arma del crimen (llámense vagones)? ¿Dónde se ha visto que ello no conlleve consecuencias? En España, claro. Recogemos las palabras de aquella campaña nacida horas después del atentado. "Queremos saber la verdad, caiga quien caiga".

Una vez más se prueba el carácter español. Apasionado en el momento, indolente con el transcurso del tiempo. La tragedia que hizo salir millones de personas a la calle hoy parece un recuerdo lejano. Nos preocupan otras cosas, como si lo sucedido hace siete años no tuviese importancia, no revelase la miseria moral y la corrupción de un sistema político decadente. Una sociedad anestesiada por el fútbol, la basura televisiva, la recomendación y la subvención.

Algún día sabremos la verdad, estoy seguro. Entonces podremos reafirmarnos o reconocer el error de nuestra opinión. Hasta que llegue ese momento, nosotros no olvidamos a las víctimas.



It is the seventh anniversary of the biggest attack in the history of Spain. A catastrophe that showed the world the moral degradation of politicians and some people in this country.

Seven years later we see black holes in the research, development, summary and implications of that slaughter. There are facts that make us doubt. Where have you seen a police officer takes a key test case in his home? Where a police officer has been ordered to destroy the makeshift gun crime (train cars)? Where have you seen that this does not sanction? In Spain, of course. Remember the phrase, hours after the attack. "We want to know the truth."

Again showed the Spanish character. Fascinated at the time, lazy with the passage of time. The tragedy that took out millions to the streets today is a distant memory. We are concerned about other things. We are a society numbed by the football, trash television and public subsidy.

I'm sure someday we will know the truth. Then we can reaffirm and recognize the error of our opinion. Until that time, we do not forget the victims.