SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

martes, 14 de septiembre de 2010

MUNDOBASKET 2010, LOS MARINE DESEMBARCAN EN TURQUÍA


Me hubiese gustado comentar cada jornada de este Mundobasket 2010, pero el ritmo de trabajo no nos permite muchos momentos íntimos con el ordenador. Contentémonos con esta breve valoración, que ya es algo.

Estados Unidos, justa campeona. Desde que la Federación americana decidió coger el toro por las riendas, aceptar que el resto del mundo había progresado y que era necesaria una planificación más seria que la de reunir a un grupo de estrellas NBA malcriadas y rebosantes de ego, los resultados son concluyentes. Una medalla olímpica y una mundial, si bien este torneo es indiferente para el país.

En Pekín fue un equipo excepcional, con los mejores jugadores de la NBA conjurados hacia un objetivo, delegando su talento en el veterano entrenador Mike Krzyewski, sagrado en la liga universitaria. En Turquía, un equipo de clase media, cuyas únicas figuras de categoría, más o menos reconocibles, eran el base Chauncey Billups, Lamar Odon y Kevin Durant. Se intuía una posible derrota contra un rival del potencial de España o Brasil -ambas estuvieron a punto de lograrlo, en un amistoso y en la primera fase, respectivamente- amén de cierta debilidad bajo el tablero.

No fue así. El equipo fue consciente de su posición desde el primer momento. Salvo dos o tres excepciones, no eran estrellas NBA, conocidos fuera de su país, capaces de cargar el destino de una franquicia sobre los hombros. Correcto. Pero eran buenos jugadores, de gran capacidad atlética. Su fuerza residía en la defensa, el contragolpe, en un ritmo intenso que ningún banquillo rival podría resistir. Si además añadían un aceptable juego en equipo y la humildad para aceptar decisiones arbitrales contrarias y la calidad de sus contendientes, tendrían unas buenas bases para aspirar a medalla.


Hay que reconocer el excelente trabajo realizado por "coach K" y su equipo técnico. Estados Unidos practicó un buen baloncesto, mostró un comportamiento impecable -muy al contrario de algún mal llamado Dream Team- supo sufrir en los momentos de incertidumbre y compitió en los partidos importantes. El Mundial coronó a un muchacho que dará que hablar en el futuro -en realidad ya se habla de él desde hace dos temporadas-, Kevin Durant. Un portento de 2,07 metros de altura, capaz de desenvolverse en todo el campo. Ganador, humilde, trabajador y educado en la victoria. Lo tiene todo para asentarse en el firmamento de la NBA.

De nuestra España, ¿qué podemos escribir? El pasado lunes, en nuestra página de "Sueños" ya gastamos toda la tinta. Mal torneo en general, sin recurrir a la hecatombe o al cambio de ciclo que ciertos medios quieren imponer porque ya no les convencen los juniors de Oro. Con Pau o Calderón será otra cosa, hay jugadores de relevo con garantías -Rudy, Ricky, Fran Vázquez, Marc Gasol, Llull...- para no pensar en revolución hasta después de Londres 2012.


El resto. Confirmaciones de Serbia y Turquía. Ojo a Eslovenia, Lituania, Francia, Rusia, Croacia y Brasil en un futuro. Felicidades a Argentina una vez más por su espíritu competitivo. Tirón de orejas para Grecia, táctica miserable la de dejarse perder para eludir a España en octavos, y para esa jaula de grillos llamada Puerto Rico. Me ha preocupado la escasa asistencia a los partidos, espero que fuese por el precio de las entradas, así como la exigencia turca de evitar o "adecentar" a las animadoras. Si quieren organizar un torneo internacional quítense el turbante. El nivel de baloncesto ha sido normalillo, con predominio de victorias holgadas, a excepción de pocos pero vibrantes e igualados partidos.

Ahora ya sólo pensamos en 2014, cuando el mejor baloncesto del Mundo se traslade a España.