SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

viernes, 25 de septiembre de 2009

UNOS PIRÓMANOS LLAMADOS SIDONIE (por Trinity)



“Que bonito es esto del amor, que nos rompe y nos parte en dos…” Así reza el estribillo de uno de los nuevos temas de Sidonie. Con el alma encendida y derrochando pasión, los catalanes presentan su nuevo trabajo, “El incendio”, 45 minutos de música con el AMOR como único y exclusivo leiv motiv . Marc, Jesús y Axel abandonan la Costa Azul para sumergirse de lleno en las sensaciones, dulces y amargas, que sólo un sentimiento tan devastador como éste provoca en cualquier mortal. Las experiencias personales están muy presentes en cada una de las letras y la sensibilidad se encuentra a flor de piel. Un auténtico regalo para los que somos fans incondicionales del grupo.


Tras haber tenido el placer de conocerlos personalmente este pasado verano en el concierto que ofrecieron en el Festival “Mar de Fondo” en Noia, (por cortesía de mi amigo Ringo), tenía muchas ganas de escuchar en directo estas nuevas canciones y, coincidiendo con un fín de semana de ocio y disfrute por Madrid, acudí a la FNAC dónde ofrecían un acústico con motivo de “La Noche en Blanco” compartiendo cartel con Sidecars y Supersubmarina. Bien es cierto que, por sus reducidas dimensiones, el auditorio de la FNAC no es el lugar idóneo para una actuación de tal calibre, por lo que el día anterior me acerqué hasta allí para saber si había que retirar algún ticket o invitación ya que la entrada era libre. En información me aseguraron que simplemente había que acudir. Total, que me presenté allí con tres horas de antelación para asegurar mi pasaporte a la hoguera sidonítica. Cual sería pues mi sorpresa cuando me encuentro con que habían repartido 120 entradas y completado el aforo con el consiguiente cabreo de servidora y el resto del personal que se encontraba en la misma situación. Ante el aluvión de protestas, el empleado de turno aguantó el chaparrón como buenamente pudo con excusas peregrinas y ofreciendo la opción de poder escuchar el concierto desde el vestíbulo, junto a las escaleras del auditorio. Vale, pues si no queda mas remedio aceptamos barco como animal de compañía , todo con tal de no perdérnoslo… Y como dice el refrán “ aún encima de burro, apaleado”, todavía nos vacilaron mas cuando, desde las escaleras, una chica que, supuestamente formaría parte de la organización, nos increpó a gritos con que no podíamos obstaculizar el espacio y que, palabras textuales, o íbamos a comprar a la tienda o llamaba a seguridad. Alucinados nos quedamos ante este alarde de atención al cliente… Primero nos mienten con el tema de las entradas, nos quedamos sin entrar en la sala y para completar el cuadro nos echan a voces a las 10 personas que, con resignación cristiana nos conformamos con ver los toros desde la barrera. Evidentemente, en la plantilla de la FNAC hay gente que necesita urgentemente unos cursos de modales y buenas maneras en la parroquia de su barrio. Desde luego y en lo sucesivo, no seré yo quien destine mi presupuesto de música y libros a engrosar las arcas de esta empresa.


Pero vayamos a lo importante. A las 23:30h. y con un vestíbulo a rebosar de gente, comenzó el concierto de Sidonie. Acompañados a la guitarra por Vicent, los tres flacuchos abrieron fuego con “Viva el loco que inventó el amor”, un tema muy dinámico que me recuerda mucho al estilo de Los Rebeldes. Tras este comienzo y los saludos pertinentes, Marc pidió a los 120 privilegiados que ocupaban el salón que permanecieran sentados en el suelo para mejorar la visión a los que seguíamos el concierto desde fuera por una mísera pantalla LCD de uso doméstico (ni siquiera tuvieron la deferencia de encender la ristra de pantallas que cuelgan tras el mostrador de entrada…). Continuaron con mas temas de este nuevo disco: “La sombra”, “Nueva York”, “Por ti”, “A la vera del mar” que suena a mejicanada total, y “El adiós”, alternados con anteriores éxitos como “Costa Azul”, “Nuestro baile del viernes”, “On the sofa”, “Bohéme” o “Sylvia”. Las llamas llegaron a su punto álgido con el primer single, “El incendio” y los corazones estallaron al son de la mandolina de Jesús con la hermosísima “En mi garganta”, coreada hasta la extenuación por todos los presentes. Una playlist bien escogida, dada las características del local y del concierto.



Resumiendo, es la tercera vez que los veo y ya estoy deseando que llegue la cuarta. Nuevamente demostraron ser unos cracks a la hora de conectar con el público y hasta consiguieron disipar la mala leche con la que nos quedamos los que estábamos abajo. Jesús no tiene precio como animador, Axel nos deleitó con sus poses en plan figurita de Lladró y Marc nos cautivó con su voz y su saber estar. Me encanta su mezcla de influencias y como se mueven con absoluta soltura entre una amplia gama de estilos, tan distintos y tan parecidos a la vez. Pero lo que mas me gusta de todo es la versatilidad que se gastan , da igual que toquen una mandolina que un sitar, que canten en español que en inglés, que vayan de psicodélicos que de dandys, que parezcan unos crápulas con pintas que unos locos enamorados… Siempre sorprenden gratamente.



Continuarán a lo largo del invierno con esta gira incandescente. Si tenéis oportunidad de ver a estos simpáticos canallas no la dejéis pasar. Sus directos, tanto en salas como en festivales, no tienen desperdicio. Nunca escatiman en proximidad y cercanía y siempre terminan liándola y mezclándose con el público. Como ellos mismos dicen en su canción “…somos un incendio sin control…”

Mas información sobre Sidonie en su página de Facebook o en www.sidonie.net

Trinity.