Terrible historia la del jugador de fútbol brasileño William Silvio Modesto Verísimo (1953-2008) más conocido en España como "Bío", autor de uno de los goles que clasificó al Barcelona para la tan recordada final de la Recopa de Europa en Basilea, en 1979. Cruyff lo recomendó para el Barça. Aterrizó en el Prat, procedente de un suburbio de Sao Paulo. "Es muy bueno, pero inestable e indisciplinado", se leía en su expediente. Tras dos años en el banquillo y muchas noches épicas, fue traspasado y comenzó la cuesta abajo. De equipo en equipo, perdió esposa, familia, sueldo y dignidad, llegando a dormir en los vestuarios de los clubes donde jugaba. En 1994 regresó a Sao Paulo. Alcohólico y tuberculoso, vagabundeó por las calles, ayudado por los equipos con los cuales recuperaba su alma perdida con fútbol. Descubierto por un periodista, el Barça le concedió una pensión, hasta que sus sufridos riñones claudicaron. Falleció un mes de febrero, tras varias semanas en coma. "Bío" nació y murió en el arroyo.
Publicado en La Región (03-11-2008)