SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

domingo, 17 de mayo de 2009

JENNIFER CAPRIATI, DE NIÑA A MUJER


Nunca se debe robar la infancia de un niño. Jennifer Capriati (Nueva York, 1976) era un prodigio del tenis con padre irresponsable, el millonario Stephano Capriati. Su ambición obligó a la niña a entrar en el circuito a los 13 años, compitiendo y entrenándose bajo un régimen opresivo. Tras ganar la medalla de Oro en los Juegos de Barcelona, nada menos que ante Steffi Graf y con sólo 16 años, estalló. Jennifer se cansó de la raqueta, de sentirse una máquina de hacer dinero para los demás, de asistir a discusiones familiares diarias, de no recibir siquiera una caricia o un azote a tiempo. Entonces intentó buscar un rumbo nuevo en su vida, y perdió el timón por completo. En 1993 fue detenida por robo y estuvo cerca de suicidarse. En 1994, la policía la encontró en un motel de Miami, a tope de crack, marihuana y sexo desenfrenado con varios hombres. La separación de sus padres fue el remate, siendo internada en una clínica de desintoxicación. En 1996 vió la luz y volvió a las pistas de tenis. En 2001 ya era la número uno del ránking, pero aparecieron las lesiones. Hoy se siente de nuevo "deprimida" y todos tiemblan.

Publicado en La Región (18 de febrero de 2008).