SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

miércoles, 6 de febrero de 2008

WILFREDO BENÍTEZ, ANCIANO A LOS 25


La señora Clara Rosa ha recomendado al gran campeón de boxeo Félix "Tito" Trinidad que no se le ocurra regresar al cuadrilátero. La señora Clara Rosa es la madre del ex púgil Wilfredo Benítez, campeón del mundo en tres categorías diferentes y hoy confinado en un centro psiquiátrico. Benítez (1958) nacido en el Bronx neoyorquino con ascendencia portorriqueña, fue un talento prematuro con la mala suerte de tener un progenitor impresentable, llamado Gregorio Benítez. Benítez padre falsificó sus documentos para hacerle debutar apenas cumplidos los 15 años, torció su espectacular carrera con absurdos enfrentamientos federativos y derrochó gran parte de la fortuna ganada con el sudor y los golpes de su vástago. Wilfredo, el más joven campeón de todos los tiempos en 1976 tampoco tenía muchas luces. Se dejó llevar por la vida fácil fuera del ring y forzó la máquina dentro, tambaleándose hasta 1990. A los 25 años, cuando otros atraviesan la plenitud, él era un viejo. Un derrame cerebral lo convirtió en un cadáver andante, dependiente de su madre, ya viuda, y de una pensión mensual del gobierno borícua. Del todo a la nada.

Publicado en La Región (18-12-2006)