SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

miércoles, 4 de agosto de 2021

EN BALONCESTO, FALTÓ GASOL-INA


 Pau Gasol es el mejor jugador de la historia del baloncesto español por palmarés y repercusión. Su trayectoria en los Juegos Olímpicos hubiese sido gloriosa de no tropezar contra los Estados Unidos.

El mejor Gasol, en equilibrio de físico y madurez -bien complementado por la mejor generación española- se encontró a dos magníficas selecciones, con lo mejor de la NBA, en las finales de Pekín 2008 -excepcional partido- y Londres 2012.

Por varios motivos, Estados Unidos presentó equipos más discretos en Atenas 2004 y Río 2016. Pero en el cruce de cuartos y semifinales, respectivamente, mostraron su mejor versión contra una España y un Gasol inexpertos, o mermados físicamente.

En Tokio 2021 se repitió la misma vaina. Estados Unidos llegó a cuartos con dudas, notables ausencias y debilidad bajo el aro. Un rival, con el debido respeto, asequible si España rindiese a buen nivel colectivo y con inteligencia.

No fue así. España se descompuso en el tercer cuarto. Echó de menos a los Gasol: Pau, más mermado por su lesión de lo que parecía. Marc, muy por debajo de sus posibilidades. Tampoco aprovechó la opción Hernangómez, 11 puntos arriba con él en pista. Sin pívots, ganar era imposible.

Una pena, aunque el error fue perder el partido anterior, que dominaron, a Eslovenia y evitar a USA hasta la hipotética final.

Fin a una maravillosa generación. Eternamente agradecidos.

Publicado en La Región (4 agosto 2021)