SIGUE SOÑANDO


Dice la leyenda que Polínexa, madre de Alejandro Magno, soñó que su hijo había sido engendrado por el mismísimo Zeus. El nacimiento coincidió con la victoria de su marido, Filipo de Macedonia, en la carrera hípica de los Juegos del 256 a.C. En honor a tal triunfo, Polínexa cambió su nombre por el de Olimpia. Su sueño se cumplió. Alejandro fue el Zeus del mundo conocido entonces. Un infatigable conquistador. El deporte es hoy lo más parecido a la guerra y sus figuras los nuevos mitos de nuestra era. Soñemos.

Legend say that Polínexa, mother of Alexander the Great, she dreamed that her son had been fathered by Zeus. The birth coincided with the victory of her husband, Philip of Macedonia, in the horse race of the Games of 256 BC. In honor of this victory, Polínexa changed her name to Olympia. Her dream was fulfilled. Alexander was the Zeus of the then known world. An indefatigable conqueror. The sport is now as war and his figures the new myths of our era. Let's dream.

olimpiaduerme@gmail.com

lunes, 14 de julio de 2008

TORRES E ISINBAYEVA, EXPLORANDO NUEVOS MUNDOS

En Pekín disfrutaremos de dos mujeres sin límite. La nadadora estadounidense Dara Torres llega en una forma estupenda a sus ¡41 años! Torres, de evidentes antecesores hispanos, posee una trayectoria tan prolongada -nueve medallas en cuatro Juegos (Los Ángeles, Seúl, Barcelona y Sydney)- como intensa. Ha superado una bulimia, varias lesiones en las rodillas, la tentación de optar por el voleibol en tierra firme y dos divorcios

En 2006 encontró la estabilidad emocional y tuvo a su hija Tessa, ingresando en el club de las mamás deportistas, junto a las Raddcliffe o Zivanevskaya. Lograda su plaza olímpica en los Trials de Omaha, en Pekín contará cinco Juegos, que podrían ser siete, de participar en Atlanta y Atenas. Una mujer increíble que explora los límites de la edad al máximo nivel.

Dara Torres, entrevistada en la cadena americana ABC


La rusa Yelena Isinbayeva aterrizará en Pekín con 26 años, la edad que conjuga a la perfección experiencia con rendimiento físico, según algunos expertos. La reina indiscutible de la pértiga batió el récord del Mundo en una reunión en Roma (5,03 metros) y mantiene una carrera en solitario en busca de su límite, al más puro estilo del ucraniano Sergei Bubka (quien curiosamente arrollaba en los Mundiales y se diluía en los Juegos).

El récord del Mundo de Yelena Isinbayeva en Roma

¿Se convertirá alguna de estas exploradoras de nuevos mundos en la novia de Pekín? Ya falta menos para saberlo.