Las fronteras y las Naciones se han establecido a base de guerras, el único sistema para solventar los problemas que parece conocer el llamado ser humano. Las consecuencias negativas de los conflictos son de sobra conocidas. Curiosamente, la necesidad de mejorar la eficacia en combate -causar más daño al enemigo y evitar en lo posible el propio- desarrolló a su vez el progreso de la ciencia y la técnica, incentivando la aparición de elementos hoy cotidianos pero revolucionarios y decisivos en su momento: la aviación, los medios terrestres, la comunicación, la propaganda, los pesticidas químicos, los rayos x, el radar, la energía nuclear, Internet...
Y la Medicina. Ningún campo como el de batalla para la experimentación y la mejora de esta ciencia (a veces Arte y otras Carnicería). El Catedrático de Química Orgánica Enrique Raviña (Teo, 1940) ha publicado un interesante y documentado trabajo, dividido en dos volúmenes. "Medicamentos. Un viaje a lo largo de la evolución histórica del descubrimiento de los fármacos". En él podremos conocer, entre otras anécdotas que el Salto adelante de los medicamentos se produce durante la II Guerra Mundial, de la cual Raviña es todo un experto; el cambio en el liderazgo mundial de Alemania en favor de los Estados Unidos, gracias a la creación de la Oficina Científica de Investigación y Desarrollo (O.S.R.D.) o la historia del desarrollo de la penicilina y la píldora anticonceptiva. Raviña también aporta sus conocimientos sobre la industria farmaceútica en España y Galicia.
No he leído el libro, pero en la entrevista realizada por Luis Pousa en El Correo Gallego, Raviña se expresa con tal claridad y fundamentos que promete una amena e interesante aventura si el doctor escribe tan bien como conversa.
Entrevista a Enrique Laviña en "El Correo Gallego" (11-Julio-2008)
Entrevista a Enrique Laviña en "El Correo Gallego" (11-Julio-2008)